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El franciscano limeño Fray Diego de Córdova y Salinas (1957) nos informa en su célebre Crónica que el capítulo provincial convocado para la fundación de la Provincia de los Doce Apóstoles del Perú fue celebrado en el año 1553, dato que se corrobora incluso con cierta anticipación, ya que, en una Real Cédula de 1550 se expresa la orden del rey al provincial peruano para que envíe misioneros a la evangelización de los indios. Asimismo, en otra carta escrita el 4 de setiembre de 1551 se solicita un pedido similar al provincial del Perú. En todo caso, lo más probable es que la Provincia de los Doce Apóstoles del Perú haya sido considerada como una entidad aún no confirmada antes de 1550, cuya confirmación oficial de creación llegó al Perú entre 1552 y 1553, con lo cual no existe contradicción alguna con la presencia y continuidad del primer capítulo provincial celebrado en el virreinato del Perú.
La importancia de este documento, además de ser un incunable impreso por Francisco del Canto en el año 1617, gira en torno al testimonio de la presencia de una de las principales órdenes religiosas asentadas en el Perú desde los mismos inicios del virreinato. La organización de los franciscanos en el Perú tuvo hitos importantes desde la fundación de la provincia. El capítulo provincial de Lima de 1607 fue otro de estos momentos, puesto que es el instante en que ocupan los cargos más importantes frailes de origen criollo agudizándose una cuestión política interna que desde la historiografía se la denomina la cuestión por la alternancia, es decir, la alternancia en los cargos entre españoles peninsulares y criollos peruanos. En efecto, este documento se contextualiza en medio de esta disputa y es muy probable que la explicación de su pronta redacción e impresión con respecto a las constituciones anteriores (1607) se deba a la necesidad de equiparar la presencia criolla en las filas de la seráfica institución.

Jean Christian Egoavil
Estudios Indianos